sábado, 22 de octubre de 2011

VA DE LIBROS





Mi buen amigo Christian me ha traído de París éste que aquí veis. Hermoso regalo, sí.




Os dejo un pedacito de la contraportada que os dará idea de lo interesante de este libro:





"Existe-t-il des caractéristiques propres à la poésie française, en comparison avec d'autres cultures? Cette anthologie essaie deles identifier, en suivant la chronologie de l'écriture poétique, considerée comme un dialogue cohérent et continu, même si les créateurs semblent toujours se réclamer de rupture et d'inouï..."





Y para los que gustamos de enlazar palabras, añado un pedacito del interior:





"Prenez un mot prenez en deux



faites les cuir comme des oeufs



prenez un petit bout de sens



puis un grand morceau d'innocence



faites chauffer à petit feu



au petit feu de la technique



versez la sauce énigmatique



saupoudrez de quelques étoiles



poivrez et mettez les voiles




Où voulez-vous en venir?



À écrire



Vraiment? À écrire?"




Raymond QUENEAU


¡Vamos allá! Si algún voluntario puede mejorar la traducción, mi agradecimiento.


¿Tiene la poesía francesa características propias en comparación con otras culturas? Esta antología trata de identificarlas siguiendo la cronología de la escritura poética, considerada como un diálogo coherente y continuo, aunque los creadores parecen siempre reivindicar la ruptura y lo inaudito…

Tomad una palabra, tomad dos
Dejadlas cocer, como huevos
Poned un poco de buen sentido
Después un gran pedazo de inocencia
Ponedlo al fuego

Al fuego de la técnica
Añadid la salsa enigmática
Triturad con algunas estrellas
Salpimentad y poned las velas

¿Dónde queréis venir?
A escribir
¿De verdad? ¿A escribir?

PALABRA DE ESCRITOR

"El odio es un borracho al fondo de una taberna, que constantemente renueva su sed con la bebida"





Charles Baudelaire

martes, 11 de octubre de 2011

PEDAZOS DE TEXTO



"El tiempo es una lluvia paciente y amarilla que apaga poco a poco los fuegos más violentos. Pero hay hogueras que arden bajo la tierra, grietas de la memoria tan secas y profundas que ni siquiera el diluvio de la muerte bastaría tal vez para borrarlas. Uno trata de acostumbrarse a convivir con ellas, amontona silencios y óxido encima del recuerdo y, cuando cree que ya todo lo ha olvidado, basta una simple carta, una fotografía, para que salte en mil pedazos la lámina del hielo del olvido"



La lluvia amarilla

Julio LLAMAZARES

jueves, 6 de octubre de 2011

OPINION.es







RECORTAR, O NO RECORTAR. That’s the question!




"No me aclaro; tiempo atrás se nos dijo que los inmigrantes venían a pagar nuestras pensiones… ahora se nos dice que la inmigración es excesiva y deviene un problema. Agradecería que me lo explicasen con números.


Entretanto, les cuento la historia de una pareja sin papeles en Barcelona. Evalúen. (Evalúen los que producen y pagan impuestos; sólo porque tienen práctica en hacer muchos cálculos para administrarse y llegar a fin de mes; subsidiados abstenerse (sin suspicacias).

Llegan los dos sin contrato de trabajo, por supuesto. No están unidos en matrimonio, por descontado. Lo primero: entrega de la cartilla de la Seguridad Social.

Ella queda encinta, deciden de consuno que el caballero no reconozca el bebé porque ya les han dicho que las ayudas españolas son más jugosas si se trata de una madre soltera (En el asesoramiento los funcionarios de nuestra Comunidad Autónoma demostraron su preparación y valía). Atención médica y parto en el hospital por cuenta de los contribuyentes. De los indígenas, claro.

El padre, que no ha declarado que lo es, se dedica a pequeñas chapuzas caseras por su cuenta, cuando las hay ¿Cómo quieren que se dé de alta de Autónomos y cotice a la Seguridad Social si no tiene permiso de trabajo ni de residencia? Tampoco puede declarar ingresos ni pagar impuestos por igual razón. He aquí la perfección del sistema.

La señora cobra los 2.500 euros (cheque bebé) y manda este importe a su país donde le guardan otro hijo de una relación anterior. Aquí, le buscan un trabajo a media jornada con sueldo pagado por la Administración. En el curro, la señora dura poco: no llega a seis meses. No hay problema; adicionalmente, recibe, a través de los servicios sociales, otras ayudas de entes diversos.


El niño, entretanto escolarizado por cuenta de los contribuyentes. De los indígenas, quiero decir. Insisto.

Por causa de varias infidelidades post-parto de la señora, el caballero le arrea un mamporro. Una contusión en la cabeza. Zona delicada. La señora denuncia la agresión y añade que además la violó. En comisaría la asesoran debidamente: posibilidad de adquirir, gracias al maltrato, el permiso de trabajo y residencia. Más aplicación de la Ley de violencia de género: intervención de la autoridad policial, de la judicial, de los abogados y del equipo multidisciplinar de ayuda a la víctima y de bienestar social. Esto cuesta poco al erario, una bagatela.

Esperando juicio, el caballero se pasa 18 meses en prisión provisional, no sea que se escaquee. Hotel nacional gratis a pensión completa durante 540 días. Bueno, donde comen dos, comen tres.

Como la situación del país empieza a ser la que sabemos y se ha multiplicado por vaya usted a saber el personal improductivo que pulula por la península, alguien decide que la señora empieza a costar cara y se le ofrece el billete de avión para que vuelva a su país. Bolivia. Y allí se va, al menos de vacaciones a ver a la familia. Billete de ida gratuito. Puede resultar rentable regresar y repetir la jugada ahora que vemos cómo funciona ¿Quién no?

Llega el día del juicio, previa movilización de funcionarios, magistrados, abogados, etc. El juicio se suspende por incomparecencia de la señora. Un pariente de una de las partes musita que la señora no vendrá, que está en Bolivia gracias a la invitación cursada oportunamente por el Estado. Estupor general. Coordinación y eficiencia impecables, como es de ver.

La Fiscalía solicita entonces a la Administración que se le facilite el domicilio boliviano de la señora para poder pedir al juzgado que le pille más cerca que la citen a declarar. Y por videoconferencia, claro está. Es fácil de imaginar el pitorreo en el pueblo del país de Morales cuando reciben tal requerimiento .

Entretanto, el pegón agraviado -o viceversa-, gracias al oficio de su abogado de idem –gratis, naturalmente- y a la benevolencia de Sus Señorías, sale en libertad provisional y… mientras llega la nueva fecha de juicio, previa advertencia de que no debe abandonar el país, es acreedor de ayudas públicas de subsistencia.

Tal vez alguien se tendría que preguntar si no es necesario replantearse el sistema.

Ésta que no es racista y que no es xenófoba; sólo nacional de un país pobre"

domingo, 2 de octubre de 2011

PALABRA DE ESCRITOR





Quo vadis?





Los ciudadanos de la Roma en llamas, asaltando el Palatino.


Nerón: "¿Es posible que los seres humanos produzcan un ruido como ése?"


Petronio: "Sí, cuando se les ha llevado demasiado lejos".

NOTICIAS


















El alcalde de Torrevieja ha anunciado un aplazamiento del Premio de Novela Ciudad de Torrevieja (Alicante), el segundo mejor dotado de España con una cuantía económica de 360.000 euros, hasta que la situación económica lo permita.

El Premio Ciudad de Torrevieja, al que este año se presentaron 524 manuscritos, está convocado por el ayuntamiento alicantino y la obra ganadora será publicada por la editorial Plaza & Janés.

FUENTE: El Confidencial. Cultura (30.09.11)

sábado, 1 de octubre de 2011

RETALES DE TEXTOS





Rebuscando en el desván, he hallado este texto de no ficción que escribí (en realidad transcribí) un día en que estaba de guardia. Ser abogado es una profesión; ser abogado y además trabajar en el turno de oficio es una vocación. El sistema prevé y garantiza el derecho de defensa y en igualdad de condiciones a toda persona. El sistema nos encomienda esta labor y nos remunera con una cantidad casi simbólica. Por supuesto que tampoco se abonan ni pagas extras, ni vacaciones; ni tenemos derecho a subsidio por desempleo. Así es como debe ser: no somos funcionarios, no tenemos amo; sólo así somos libres y esta es la garantía para aquellos a los que defendemos. Los honorarios simbólicos los satisface el sistema; nosotros ponemos el resto.


EN COMISARIA

El nombre me es vagamente familiar.
—¿Tiene antecedentes? —pregunto al instructor mientras hasta nosotros llega el tintineo de llaves abriendo el calabozo.
—Sí, de antiguo; y el último es también un robo —contesta.
Pelo oscuro, casi negro, ondulado y revuelto. Manos trabajadas, huérfanas, como la ropa, de un buen trato y un mejor enjabonado. Parece llevar prendas de otro, de lo holgado del suéter y del tejano. Saluda con humildad a los presentes. Se lanza a hablar, atropelladamente, pero con voz baja y clara. Mirada frontal, ávida y suplicante de unos ojos oscuros y nerviosos. Está asustado.
—No fui yo. Estaba allí y de repente, uno que vino rompió el cristal ¿sabe usted? Y cogió algo del coche y salió corriendo… y resulta que salió del coche uno que estaba sentado atrás, y me dio a mí con un palo ¿ve usted? Aquí —señala con el dedo un corte cubierto de sangre seca— aquí me dio… y me asusté y eché a correr también, pero yo no fui, pero no pude correr mucho y todos detrás ¿sabe usted? Porque yo, no pude correr mucho, porque tengo cáncer ¿sabe usted? ¿la medicación? ¿han traído ya mi medicación? Es que estoy en tratamiento… he perdido veinte kilos ¿sabe usted? Tengo cuarenta y tres años; he sido empresario, me iban bien las cosas, tenía trabajadores… ganaba dinero, estaba casado ¿sabe usted? Mi mujer me dejó y ahora vivo con mi madre ¿ha traído mi madre la medicación? Soy pintor, si usted supiera… pero era joven, ganaba dinero, me volví loco y aquel mal paso, lo perdí todo. Y ahora que estaba recuperado de la droga, porque me salí de la droga ¿sabe usted?...
—¡A ver, Gabriel! ¿Quieres declarar aquí o en el juzgado? —interrumpe el instructor.
—¡Quiero hablar con ella! —exclama señalándome con la mano— Por favor, quiero hablar con ella, señor agente.
—Me curé de la droga y ahora el cáncer. No tengo cura, es de huesos ¿sabe usted? He perdido veinte kilos. Tuve un juicio hace tres meses ¿sabe usted? Y me suspendieron la pena de prisión, estoy con libertad condicional, y yo no he sido, pero me acusan de esto y si me condenan, pues, ingreso ¿sabe usted? ¿verdad que ingreso? No puedo ingresar, tengo cáncer, me queda poco tiempo. Y no me dejan ver a mi hijo, hace meses que no veo a mi hijo, tiene diez años ¿sabe usted?En el hombre asustado, el temor cede paso a la desolación, al desespero. Rompe a llorar. Saltan las lágrimas. Se seca la cara con las mangas del jersey. Pide perdón.
—Ya le ha visto el médico; está pautado y se le administrará además su medicación, a la hora que le toca. No se preocupe. Nos hemos ocupado —responde el instructor a la pregunta que no salió de mis labios pero sí de mi mirada.
—Y me denunció, por amenazas, pero sí, la amenacé, pero fue porque no me dejaba ver a mi hijo ¿sabe usted? Y me pusieron alejamiento, pero yo no he ido, no señora, ninguna vez, siempre ha ido mi madre a buscar al niño para traerlo a casa y que yo pueda verlo un rato, un poco, sólo para verlo y ¿sabe usted? Echó a mi madre y le dijo que si va a buscar al niño me denunciará, que dirá que yo voy y tengo el alejamiento y volveré a prisión…
Hablamos y, poco a poco, se tranquiliza. Sabe que dormirá en el calabozo de comisaría. Sabe que nos veremos mañana y que será después de que yo haya leído el atestado que él declarará ante el juez.
¿Qué dirá el atestado? ¿cuál será el relato de los hechos minuciosamente diligenciados por la policía? Lo ignoro. Hasta mañana no lo sabré. ¿Miente? No lo sé y en este momento poco me importa. Lo que sí sé ahora es que la profesión de abogado se me antoja una herramienta insuficiente para paliar tanto drama. Y echo mano de mis otros recursos, de aquellos de los que a uno no le examinan en la facultad. Este equivalente del “Se le supone” militar, no va inscrito en el carnet profesional, pero sí está grabado en el alma de los abogados del turno de oficio.

OPINION.es






"¿POR QUÉ NO ME ESCUCHAS?"

Todos andamos con prisas, a la carrera, y dominados por la impaciencia. Los tiempos y la situación fomentan estos males que devienen contagiosos.
Para hacernos escuchar en medio de la vorágine, no basta con un megáfono; conviene un discurso estructurado, breve, concreto y conciso. Hablar del asunto y orillar la filosofía del asunto, dejando ésta para los foros de reflexión o para el ensayo.
Actuar conforme a tal distinción conduce a la eficiencia en el discurso, pero exige, como condición previa, autodisciplina y orden en el pensamiento y excelencia en el uso del lenguaje.
Es una pena observar cómo se diluyen en la nada exposiciones interesantes, incluso importantes, a causa de la falta de preparación o de la desidia del hablante o escribiente.


Rosa María Torrent